Septiembre

8-sept-2005

Creí que iba poder volver a clase como si nada, pero el lunes, nada más sentarme ante la pantalla del ordenador comenzaron a brotar más y más lágrimas. Yo intentaba contenerlas, y menos mal que siempre llego muy pronto, porque así nadie me vio. Pero cuando llegó el profesor, le tuve que preguntar que cuanto tiempo quedaba para que terminara su parte del master y a él le extrañó la pregunta, por lo que me dijo que si me pasaba algo (mi cara también debía indicar bastante) Le dije que si se lo podía explicar fuera de clase. Y allí como una imbécil me puse medio a llorar y se lo expliqué entre balbuceos.
Al final, después de todo y a pesar de las mil facilidades que me han puesto él y el director del master, he decidido que sí voy a terminar las clases. Me queda menos de un mes. El proyecto no, eso lo haré cuando pueda. Quizás pueda parecer extraño, pero es que todos me dicen que no me preocupe, que ya lo haré después... Pero no entienden que es demasiado duro pensar en el después, porque ese depués significa que ella ya se habrá ido, que ya no estará. Y no sé, me parece horrible pensar algo así como: "cuando muera mi madre, podré retomar las cosas" Me resulta durísimo pensar así, porque es como si lo estuviera invocando...
De momento todos los fines de semana me voy a casa para cuidarla, para estar con ella... Mañana es viernes y es fiesta en Madrid, lo que significa que no tengo clase y tengo un día más para estar con ella...
Después del master, a principios de octubre me quedaré con ella todo lo que pueda y ya no pienso separarme de ella hasta el final. Me resulta verdaderamente extraño hablar así. Quizás es porque últimamente no me lo creo. He vuelto de nuevo a esa fase. No lo acepto y no puede ser verdad. Estoy todo el día de nuevo serena, y sólo lloro después de hablar con ella por teléfono y por las noches.

12/09/2005

El fin de semana con ella ha sido duro, como casi siempre que estoy con ella. Dice que tiene ganas

de ponerse ya bien de una vez. Y yo me quedo callada. Me imagino que quizás sí sospecha algo pero no quiere darse cuenta, como otras veces que estaba enferma... A pesar de que se lo decíamos suavemente ella se empeñaba en que no... No puedo evitar sentirme mal porque al fin y al cabo ocultarle la verdad, es mentirle...pero cada vez estoy más convencida de que es mejor así, de que ella no podría soportarlo. Y pienso que si lo supiera no querría ni levantarse de la cama, ni tomarse la medicación... y creo que se dejaría ir, como se dice coloquialmente...